José Simón, el hermano mayor, hacía tiempo había adquirido el hábito de la escritura, sus hermanos menores – ahora músicos – aprovecharon esta circunstancia, y le pusieron música a sus letras. Así, nació esta hermandad en la melodía criolla, llamada: Los Hermanos Simón, integran el conjunto de ARTE NATIVO de José Gómez Basualdo, para luego, crear, junto a su padre, El Baile Popular, acontecimiento, que congregaría en la calle Independencia de Santiago, a artistas de diversas provincias.
A fines de la década del 50, Los Hermanos Simón: Miguel, José, Juan, Ricardo y Juanita – vivían el momento más esplendoroso de su carrera; habían hallado en una página en blanco, tal vez en un silencio, quizás en un pentagrama vacío, una chacarera: LA TERMEÑA
Atahualpa Yupanqui, quien llamara a los Hermanos Simón: “Mis hermanos en re menor”, les entrega de puño y letra, los versos de la “Vidala”, que luego se hicieran famosos en la boca de José:
“Me está quemando en el pecho,
la copla de la vidala
y ando y solo por el monte
no tengo bombo ni caja”
El fallecimiento se José y Juan Simón y el retiro de Ricardo y Juanita determinan que sólo Miguel continúe como intérprete y compositor, de los Hermanos Simón. Miguel comienza a ejecutar el bandoneón hasta convertirse en uno de los mejores bandoneonistas del país. Tal esa sí, que en 1987, Pedro Favini y Oscar Valles le dedican la zamba: “El duende el bandoneón”
A fines de la década del 50, Los Hermanos Simón: Miguel, José, Juan, Ricardo y Juanita – vivían el momento más esplendoroso de su carrera; habían hallado en una página en blanco, tal vez en un silencio, quizás en un pentagrama vacío, una chacarera: LA TERMEÑA
Atahualpa Yupanqui, quien llamara a los Hermanos Simón: “Mis hermanos en re menor”, les entrega de puño y letra, los versos de la “Vidala”, que luego se hicieran famosos en la boca de José:
“Me está quemando en el pecho,
la copla de la vidala
y ando y solo por el monte
no tengo bombo ni caja”
El fallecimiento se José y Juan Simón y el retiro de Ricardo y Juanita determinan que sólo Miguel continúe como intérprete y compositor, de los Hermanos Simón. Miguel comienza a ejecutar el bandoneón hasta convertirse en uno de los mejores bandoneonistas del país. Tal esa sí, que en 1987, Pedro Favini y Oscar Valles le dedican la zamba: “El duende el bandoneón”
FRAGMENTO DEL GUIÓN EMITIDO AL AIRE
EDICIÓN ARTÍSTICA: CELSO MIÑO / ALEJANDRO CAROSELLA
IDEA Y TEXTOS: PEDRO PATZER
COORDINACIÓN: MARCELO SIMÓN, EL AIRE DE AQUÍ
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